Una impresora 3D al alcance de todos
Sabemos que has escuchado o leído sobre lo que puede hacer una impresora 3D. Es utilizada por médicos, diseñadores y también arquitectos, imprimiendo desde una prótesis de mano hasta un departamento de 38m2. Tener acceso a una de ellas parecía imposible, pero Torbjorn Ludvigsen, un estudiante de física sueco, ha creado una máquina amigable para ser usada por todos.
La impresora 3D Hangprinter funciona suspendida mediante unos cables y con un sistema de poleas que se puede controlar por una computadora. Ésta es capaz de imprimir en 3D muebles de cualquier tamaño en la misma habitación, la que sirve de cámara a la impresora, pudiéndose crear cualquier tipo de mobiliario.
El estudiante universitario tiene el objetivo de popularizar la impresión 3D y la Hangprinter cuenta con las características que la conviertan en una herramienta para todos los públicos. El precio de la impresora es de solo 250 dólares. Además ha decidido compartir el diseño de la máquina de forma abierta, dándoles la oportunidad a todos a construirla en su casa o que algún desarrollador pueda colaborar con el proyecto.
Mira aquí cómo funciona la Hangprinter 3D:
